sábado, 7 de noviembre de 2015

¡BUENOS DÍAS!

¡Hola a todos!


¿como andan? yo bien, me levante muy temprano :D como se habrán dado cuenta no se que escribir, así que me pondré a escribir capítulos de "Eternally" ¿quieren? 

viernes, 6 de noviembre de 2015

DEN SEÑALES DE VIDA POR DIOS

¿Están vivos? si lo estas, comenta <3 bueno espero que el primer capitulo les haya gustado.
Siganme en Wattpad (aquí) que yo los seguiré al instante, nunca me despego de Wattpad jajaja me voy a dormir porque mañana me voy a playa, voy a escribir muuuuuchos capitulos, eso espero. Bueno que tengan lindo día y los quiero, besos.

Eternally Capitulo uno

14 de febrero de 2014
Puede que haya cometido muchos errores cuando no era un fenómeno pero ¿tan duro es el castigo? 
Muchas mujeres deben envidiarme mi juventud pero lo que ellas no sabes ni imaginan es que con gusto se las obsequiaría. Si los años pasaran en mi, sería polvo de esos que se juntan en los libros cuando ya no los lees.
Me he graduado incontables veces, he visto morir a todas las personas con las que eh sentido cariño alguno. Esto es un infierno interminable.
Uno que nunca acabara.
Aprendí a no afecto hacia alguien. 
Aprendí que voy a estar sola toda mi vida.
Ellos morirán, yo me quedare aquí.
Tuve que sufrir mucho para aprender lo que aprendí.
En este momento, en el ahora. Soy parte de una familia igual a mi, piel pálida, ojos rojos y tan condenados igual que yo. Creo que nuestro consuelo era estar siempre juntos. 
-Iré al bosque -anuncie en un tono normal. 
Tome el pomo de la gran puerta de madera para marcharme, una corriente de aire me invadió. Era Cross el "hijo" por así decirlo de Demetrius y Elisabeth. Ellos lo habían transformado cuando lo encontraron moribundo entre bolsas de basura en un temible callejón, en el momento que ellos decidieron transformarlo automáticamente el se volvió en su hijo de alguna manera. 
Dicen que los vampiros no tienen corazón, que no les importa nadie pero es mentira o al menos una parte. Ellos eran la excepción. 
Yo no me considero una persona buena ni con sentimientos, desde aquel momento que hundí mis colmillos en la yugular de ese pobre e inocente joven y lo asesine, deje de considerarme una persona. El me pedía, incluso imploraba que no continuara pero yo hice caso omiso y me deje llevar por mi instinto. Ese es mi motivo por el cual no bebo sangre humana, cada día lucho contra eso y lo logro gracias a mi auto control pero también gracias a mi familia. 
-Voy contigo -dijo esbozando una sonrisa
-No iré a cazar Cross, quédate aquí -dije, trataba de tener un poco de paciencia pero su sonrisa burlona no me lo permitía.
-No te dejare sola, vayámonos. 
Abrió la puerta y entonces comenzamos a caminar a paso lento, observando los altos arboles que cubrían el cielo, era de día pero parecía de noche. 
Quería estar sola para torturarme sola, sin que nadie me viera. Quería imaginarme una vida sin ser así, fantaseaba con saber como se sentiría morir, como sería ser madre y tener una vida normal.
-¿En que piensas? -preguntó Cross, sacándome bruscamente de mis pensamientos.
-Nada -respondí sin mucha importancia.
-Siempre te quedas mirando a la nada, pensando horas y horas frente aquel tronco -señalo justamente el lugar donde estaba el gran tronco seco postrado en el suelo, cubierto por la maleza. 
Allí pasaba horas pensando, se suponía que era un secreto entre ese tronco y yo pero se ve que no es así. 
-¿Me has estado siguiendo? -pregunté -que estúpida soy, me has estado siguiendo -afirme seguido de un gruñido molesto.
-Estúpida no pero despistada pue... -lo interrumpí con un fuerte golpe en el brazo que provoco que lleve su mano hacía ese lugar y registrarlo para suavizar el dolor.
-Eres linda y fuerte, me gusta -dijo adolorido. Reprimí una risa, por lo que he visto, si a una chica enamoradiza le dicen algo así se sonroja, su sangre se sube hacía sus cachetes y parecen tomates, ellos lo ven lindo pero para mi es patético ademas de que es una fuente de comida...
-Lose. 
Ser egolatra no es malo ¿no? en realidad no soy así pero admito que tengo fuerza, solo eso. 
No me considero perfecta ni nada parecido al calificativo "linda". Mis grandes ojos negros aveces rojos carmesí, mis labios pintados de color sangre y mis cabellos color nuez no son la gran cosa. 
Lo que es gran cosa es tener una vida normal, hay veces que merodeo los techos de los edificios en la ciudad observando a la gente que lleva una vida tranquila y patética, pero amaría tener esa vida patética solo un día, dejar estos malditos colmillos, mi piel pálida y mi sed de sangre. 
-Los años te han vuelto egocéntrica Ann, de eso estoy seguro -dejo en claro. Claro que no, odiaba que algún chico se interesara en mi o que me adularan con tonterías, era odioso.
-A ti los años te volvieron mucho mas idiota de lo que ya eras -me burle. Su rostro trataba de parecer algo dolido y ofendido pero lo que en realidad consiguió fue una cara chistosa y divertida. 
-¿Como lo soportas? -preguntó observando los arboles que se movían al movimiento sereno del viento. 
No entendía que venia su pregunta, solo lo había preguntado sin previo aviso.
-¿A que te refieres? -inquirí con mi ceño fruncido
-Soportar. Beber sangre de animales y no de humanos. ¿Cómo lo soportas? 
-Prefiero no hablar de eso -dije acomodando mi cabellera hacia un lado solo porque provocaba picazón en mi frente. 
-¿Porqué nunca lo haces? -pregunto observándome con sus ojos que provocaban incomodidad a cualquiera que observará pero con la diferencia que en mi no lo causaba -Llevare tu secreto a mi tumba -bromeó, su sentido del humor estaba intacto, seguía igual al de hace años, malos.
-Muy gracioso Cross -solté una carcajada fingida
-Me conoces, sabes que no diré absolutamente nada si tu no lo deseas -dijo. Era imposible no confiar en el y mas cuando te observaba con esos ojos tan sinceros pero a la vez tan traicioneros... 
-Esta bien -suspire en modo de derrota -Hace mucho tiempo yo fui humana, no era como ahora tenía una vida, un trabajo y una familia. 
Todo aquello cambio cuando tome la estúpida decisión de caminar en un sendero sola a altas horas de la noche solo para llegar a tiempo -pare para mojar mis labios resecos, Cross miraba atento cada movimiento que daba -al mediocre trabajo que tenía, solo importaba llegar a tiempo para que mi jefe no me rebaje el poco dinero que me ganaba pero eso fue en vano ya que un maldito vampiro me convirtió en esto. No llegue a mi trabajo, deje a mi familia y perdí mi vida. No sabía como alimentarme, fue horrible pero cuando supe como no tenía control -me detuve y mire hacia el cielo que estaba tapado con espesas capas de hojas que yacían en los arboles, tome una bocanada de aire y continúe -inocente o no, tomaba sus cabezas, ejercía la fuerza suficiente como para romper su cuello y lo giraba hacia un lado, una muerte instantánea. Mis colmillos punzantes se clavaban en la víctima, había veces que dejaba que sufran y otras los dejaba sin vida.
Así fue por unos años hasta que... un joven de ojos verdes, muy humilde y buena persona -como las anteriores- se cruzó en mi camino cuando estaba en abstinencia de sangre, ataque por la espalda, fue de cobarde lose pero solo lo hice. Recuerdo que el rogaba que parará sus ojos tenían algo que me provocaba sentimientos que jamás había sentido, sentía culpa y arrepentimiento pero no pare, decía que me daría las pocas pertenencias que poseía pero yo no quería eso, quería su sangre. Me fui de allí y el sentimiento de culpa que jamás había sentido me atormenta cada día, cada ojos verdes que observó me recuerdan a ese día -finalice con la cabeza mirando mis pies, sentía un nudo en el estómago y en la garganta, es extraño que haya tenido el valor de contarle a alguien mas que no sea Demetrius y Elisabeth. De alguna forma de había aliviado. 
-No fue tu culpa a todos alguna vez no pasó aquello, pasaron años y ya no tiene sentido torturarse con recuerdos -froto mi brazo tratando de aliviar mi sufrimiento - Te preguntare algo si tu quieres -asentí. 
-¿Estas segura de que murió? Tu no lo viste morir -fundamento. La culpabilidad y el arrepentimiento habían sido substituidos por intriga, misterio y confusión. 
Que pasaría si estaba vivo justo en el momento en el que lo deje, en el momento que yo pensé que no respiraba mas y que su corazón había dejado de latir... Si el no había muerto si yo no lo había matado entonces el estaba vivo y era como yo. Era un vampiro.


¡Hola de nuevo!

¿Como están? yo muy bien, ahora.
Hace dos días quede en publicar el PRIMER CAPITULO DE "ETERNALLY" pero no lo pude publicar ¿porque? porque perdí el capitulo así que lo volví a escribir y después tuve un problema con mi computadora y me tarde muuuucho.
Pero las cosas siempre tienen un lado bueno y este es que les tengo el capitulo, en dos minutos lo subo, no me maten.
Las personas que leen esto no me odien, perdónenme, los iloviu

miércoles, 4 de noviembre de 2015

Nota, aviso o lo que sea

¡Hola gente!

Les cuento que ayer no publique nada por que estaba enferma, lo bueno es que me siento mucho mejor, no iré a la escuela así que estaré todo el día aquí, escribiendo nuevos capítulos para mi novela, ¡si!
En un ratito chiquitito subiré el primer capitulo de "Eternally" espero que les guste y dejen comentarios :)

Nos vemos :)

lunes, 2 de noviembre de 2015

¡HOLA!

Como habrás visto investigue un poco en Google y logre aprender. Fue fácil, ¡es como escribir algo simple! wow.
Bueno espero que les haya gustado, mañana temprano subiré capítulos porque NO TENGO CLASES<3 por suerte. En fin, muchas gracias por leer, lo había olvidado, tengo una cuenta en Wattpad, puden darle al botón "seguir" si así lo quieren o solo mandar un mensaje, cualquier cosa me alegra.
Mi usuario de Wattpad 

Saludos y abrazos a todos

Eternally


Prefacio
21 de octubre de 1872
El estrecho sendero oscuro y tenebroso se encontraba abrazado en un manto de niebla. 
Las hileras de árboles moviéndose en la dirección del viento. Ruidos extraños de animales salvajes invadían mis oídos causando que mi corazón se acelerara, mis piernas trataban de caminar deprisa pero cada vez que avanzaba faltaba mucho para poder ver la salida.
Cada paso que daba mis botas se clavaban en la tierra húmeda provocando crujidos de hojas, ramas y basura.
Trataba de distraerme pensando en que excusa le diría a mi patrón por retrasarme puede que me despida o puede que me baje la paga. Era un riego que debía correr. 
Había tomado este camino porque decían en el pueblo que era un atajo y uno muy tranquilo, no era lo que me imagine pero que mas da ya estaba aquí caminando tratando que controlar las ganas de correr.
¿Mi mente me jugaba una mala pasada? Imagine o vi una sombra de hombros anchos y de gran altura. 
Esta se reflejaba en los troncos de los árboles. Sus movimientos eran un claro intento de querer esconderse pero yo ya la había visto. El miedo estaba creando sombras, ruidos... era parte de mi imaginación quizá, pero que tal sino y lo que veía era cierto. 
Tal vez era un campesino que estaba cazando ya que aquí se pueden encontrar conejos u otro animal comestible. Solo era mi imaginación. 
Convencida que el miedo había recreado esas sombras seguí caminando con el mismo miedo y nerviosismo que hace segundos antes. 
Se oían las hojas de los árboles y arbustos que acompañaban el movimiento del viento, su ruido era inquietante. 
Faltaba caminar algunos metros, creo. Mis manos tomaban la áspera tela de mi gastado abrigo solo por inquietud, solo para mantener mis manos ocupadas en algo y no pensar tanto en el temor que me causaba estar aquí. 
Mis oídos captaban ruidos de pasos cautelosos, estos se aproximaban hacia mi, cada vez los escuchaba más cerca. 
Sentía que alguien posaba su vista en mi, yo podía sentir que me observaban desde algún punto de este largo y tenebroso sendero. 
Mi cuerpo hacia un esfuerzo en seguir el camino tranquila pero eso cambio cuando divisé una silueta negra, aquella se semejaba a una persona de sexo masculino lo deduci por su tamaño. Me aproximaba hacia el solo para descubrir si necesitaba algún tipo de ayuda o si se había perdido, mis piernas caminaban algo deprisa. El solo hecho de encontrarme a alguien aquí, en este lugar, me dejó más tranquila pero solo un poco. Mientras mas me acercaba a esa persona con más claridad podía ver.
La luz de la luna era opacada por una nube, esta solo dejaba ver una parte de su vestimenta, su forma de vestir era de alguna manera extraña. Un gran abrigo de color azabache con algunos detalles color platinado. 
El estaba quieto como un cuerpo inerte, sin vida. De su parte no emitía ningún movimiento ni ruido. 
No pasaron segundos cuando el emitió una carcajada con aires de malicia, retumbó en mis oídos causando un temor mayor. Nos separaban unos escasos metros y todavía no conocía su rostro. 
Los destellos que irradiaba la luna enfocaron por fin su rostro, por desgracia. Lo que veía era lo más malévolo y diabólico que había visto en mis veinticinco años de vida. 
Su rostro era tan pálido como la nieve, como un cuerpo sin vida y sus ojos... estos eran rojos como inyectados en sangre. Mi reacción era miedo puro y esto causó que él esbozara una sonrisa maléfica, una hilera de dientes eran interrumpidos por un par de colmillos afilados y blancos. ¿Qué demonios era? 
Le rogaba a mis piernas para que reaccionarán pero el intento era nulo, era imposible reaccionar ante tal criatura. Mis palabras no salían de mi boca, era incapaz de formular palabra alguna. 
Lo que sea que tenía frente a mi se abalanzó contra mi cuerpo con una fuerza sobrenatural, mi cuerpo arremetió contra el suelo de tierra húmeda. 
Me encontraba inmovilizada bajo su cuerpo, sus ojos rojos eran penetrantes y llenos de diversión. 
Sentía mis mejillas empapadas en lágrimas, gritaba pero no salía ningún sonido. 
Mis muñecas estaban adoloridas, sentía sus uñas clavarse en mi piel fuertemente como ganchos puntiagudos. Sus colmillos buscaban enterrarse en mi yugular, sedientos de sangre. 
Luchar, dar pataletas u llorar no me salvarían de nada, era mi fin. Aquí había terminado mi corta vida. 
Me entregue a mi destino, morir en manos de una criatura chupa sangre. 
Deje de luchar por mi vida e inmediatamente él susurro "no morirás pero estarás muerta en vida" e inmediatamente sentí dos agujas clavadas en mi cuello y un dolor que se intensificaba cada segundo, por fin el grito había conseguido su libertad pero ya no importaba. 
Palabras sin sentido alguno se escuchaba a lo lejos, el eco de voces, el dolor insoportable y luego un manto de oscuridad me envolvió.